This Week's Story
Moisés, tienes todo lo que un joven puede desear. ¿Por qué desperdiciarlo?

This Week’s Story relives American history and the Bible through brief inspiring stories presented on mp3 audio recordings and text for reading.
¿Puedo ser Principe y Esclavo?, parte dos
“Madre, eres una egipcia fiel, sin embargo me rescataste y traicionaste al Faraón. ¿Cómo pudiste vivir con eso? ¿Debería vivir como hebreo y egipcio?”
“Moisés, eres mi hijo adoptivo y un príncipe real de Egipto. Un día serás Faraón y un dios. Gobernarás a los hebreos”.
“Madre, te quiero, pero los esclavos hebreos son mi familia de sangre. Debo lealtad al Faraón y a los esclavos hebreos también. Mi familia hebrea me protegió cuando iba ser asesinado por los soldados del Faraón. Tú, la hija de Faraón, me salvaste de la muerte. Por tu orden, mi madre hebrea me amamantó. Sus canciones están en mi corazón. Me enseñan que hay un Dios verdadero, y no es el dios de Egipto. Me proporcionaste profesores que me enseñaron la sabiduría de Egipto. Madre, ¿qué camino sigo?”
“Como hebreo, no tendrás ninguna oportunidad de poder, Moisés. Estás entrenado para el liderazgo”.
“¿Qué clase de líder seré? ¿Liberaré a los esclavos?”
“¡Que tonterías, Moisés! Has recibido la mejor educación disponible en el mundo de hoy”.
“Madre, soy lento de habla. A veces tartamudeo”.
“Eso es cierto, Moisés; eres deliberado, y también eres elocuente. Eres conocido como poderoso en palabra. Tus logros militares son remarcables.
“Moisés, coincide conmigo sobre este asunto. Soy ahora reina y tú eres mi único hijo. Hay otro contendiente por el trono. Tu y yo debemos ganar esta competencia para que te conviertas en Faraón”.
“Madre, hoy estuve en Gosén. Mi gente fue tratada brutalmente por los guardias egipcios. Observé como un hebreo era azotado. Yo lo defendí y maté al agresor egipcio. Lo enterré en la arena. Mañana regresaré a Gosén”.
“Durante casi cuarenta años, hijo mío, has vivido con riqueza, sabiduría y la promesa de poder. ¿La malgastarías con los esclavos?”
“No sé lo que haré, pero sé que tengo parte de mi gente en Gosén”.
Al día siguiente cuando Moisés estaba en Gosén, dos hombres hebreos luchaban fuertemente. Uno era evidentemente culpable. Moisés se acercó a él y le preguntó, “¿te das cuenta de lo que haces?”
El hombre contraatacó, “¿Quién eres tú? Nadie te nombró para ser nuestro Príncipe y juez. ¿Me matarías, como mataste al egipcio ayer?”
“Tu pelea es ridícula,” respondió Moisés, pensando al instante, “me vieron ayer y se lo dirán al Faraón. Si quiero vivir, debo huir de Egipto hoy, o seré acusado de asesinato. Mi castigo será morir ahogado, decapitado o atravesado en una estaca.
“Viajaré por la noche con las estrellas. Sé sobrevivir en el desierto. Cruzaré la península del Sinaí y me dirigiré hacia Madián.”
Pronto y sin ninguna oportunidad de ver a su madre o familia hebrea, viajó con lo esencial y un caballo de los establos reales. Debo apresurarme. Que el Dios de mis padres hebreos me guie.
Soy Elena Gamez por Barbara Steiner. Los eruditos continúan la investigación sobre Moisés. Acepté la ubicación del viaje de Moisés a Madián en los años 1486 A.C. Por favor visite thisweeksstory.com.
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