This Week's Story

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Peter descubre que los húngaros se reúnen para oponerse al gobierno comunista, a pesar de que estaban arriesgando su educación, trabajos y vidas.

This Week’s Story relives American history and the Bible through brief inspiring stories presented on mp3 audio recordings and text for reading.

Liderazgo sin Misericordia,
parte tres 

Peter estaba preocupado mientras volvía a casa de su clase de estudio comunista. Lo más que aceptaba el comunismo, lo más que su familia lo rechazaba. Su madre, hermano y hermana estaban en silencio en la sala. “¿Por qué no están hablando?” preguntó.

Su hermano Alex abrió su boca, pero no salió ni una palabra. Su hermana mayor Mira estaba temblando. “Peter, ¿Reportaste a papá a la AVO?”

“¡No! ¿Dónde está él?”

“No sabemos. Cuando salí de la fábrica, jóvenes y hombres gritaban, 'Si eres Húngaro, únete a nosotros'. Ellos corrieron a la estación de policía cercana”.

“Otro vecino gritó,” Un tanque con hombres de la AVO al mando, disparó a los jóvenes y hombres. Vi a un hombre saltar sobre la torreta del tanque y abrir una escotilla de escape. Disparó a hombres que estaban dentro.

Peter ordenó a su familia, “¡quédense en casa! Iré a ver lo que está pasando”.

Alex habló con enojo, “¿por qué deberíamos confiar en ti? Llamaste a Papá traidor. Papá espera que resistamos la dominación comunista rusa y la AVO en nuestro país. ¿Qué harás tú?”

Peter no pudo responder. Se volvió hacia su madre. “Por favor, mamá, puede haber peligro para todos nosotros. Quédense aquí. Regresaré”.

Corrió por las escaleras de su apartamento. En la calle se enteró que una revuelta había sido iniciada por jóvenes. Una multitud se estaba reuniendo en la Radio Budapest.

Sin pensar en lo que podría hacer, inició por el edificio de la radio. Esta solamente producía información que los comunistas húngaros querían escuchar. 1.200 artistas y técnicos trabajaban allí. Ochenta policías secretos de la AVO custodiaban la radio con ametralladoras.

Peter vio tropas de apoyo entrando al edificio con suministros de munición. Un grupo de estudiantes universitarios llegó y pidió el derecho a la difusión de sus demandas de cambios en la política de gobierno. Los hombres de la AVO se rieron y respondieron, “Pueden grabar sus demandas. Tal vez escuchemos su grabación en la radio”.

Los estudiantes vieron que era una trampa y se negaron. Trataron de forzar su entrada. Los hombre de la AVO comenzaron a lanzar bombas de gas lacrimógeno contra la multitud, y la gente comenzó asfixiarse y retroceder.

Pronto la multitud de nuevo empezó a empujar contra las puertas. Más gases lacrimógenos fueron lanzados contra ellos. Dos gigantescos rayos de luces comenzaron a alumbrar la multitud. Las personas sabían que estaban siendo identificados.

Arrojaron piedras y la AVO comenzó a disparar contra la multitud. Gente moría. Camiones comenzaron a llegar y los trabajadores salían de ellos. Los guardias de la AVO se asombraron pero la multitud se emocionó de ver trabajadores de la fábrica de la isla de Csepel. Traían armas y municiones para los manifestantes.

Peter miró a la gente joven, estudiantes y obreros que protestaban a su alrededor. Estos eran los que Radio Budapest se jactaba eran la prueba de que el comunismo responde a las necesidades de sus seguidores. Sin embargo esas personas se reunieron para oponerse al gobierno, a pesar de que estaban arriesgando su educación, el empleo y la vida. Él sabía que la AVO y sus espías los denunciarían. Para esa noche el castigo sería seguro.

Soy Bárbara Steiner con escenas de la revolución húngara que se desarrollaron en Budapest el 23 de octubre de 1956. Algunas personas Vamos a seguir con la historia pronto.

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