This Week's Story

Un guerrero poderoso sirio busca una cura para la lepra que está mutilando su cuerpo.

This Week’s Story relives American history and the Bible through brief inspiring stories presented on mp3 audio recordings and text for reading.

Una Receta Médica muy Extraña

El aspecto de Naamán preocupó a su familia y sirvientes cuando regresó a casa después del servicio militar.

Todavía tenía cuerpo de guerrero poderoso, pero su cabeza y cara estaban desfiguradas por la enfermedad. La calvicie y granos habían reemplazado gran parte de su gruesa y negra cabellera. Sus cejas casi habían desaparecido y estaban rodeadas con piel muy seca y blanca.

El escuchó a su hijo preguntar, “mamá, ¿qué le ha pasado a papá?”

“Hijo, él tiene lepra”.

“¿Va el rey Ben-adad a remplazar a papá con un nuevo comandante?”

"No. Tu padre es un gran líder. Él ha dirigido nuestras tropas en muchas victorias y es muy admirado por el rey. En Siria los leprosos pueden mantener sus trabajos, mientras que físicamente pueden manejar sus responsabilidades”.

Esa noche la esposa de Naamán le dijo: "por favor, escúchamecuidadosamente. La nueva esclava de Israel me dijo hoy, 'hay un profeta llamado Eliseo en mi país, que podría curar la lepra de mi amo. Desearía que mi amo vaya donde él se encuentro.' Mi esposo, pidele al rey te permita viajar donde este profeta".

Naamán pensó, "Si existe la posibilidad de ser curado, lo buscaré." Él dijo: "mi esposa, le pediré permiso al rey Ben-adad para ir a Israel".

El rey aceptó y le dijo a Naamán. "Antes de ver a ese profeta, lleva mi carta de presentación al rey de Israel".

Inmediatamente Naamán y sus oficiales viajaron a Israel llevando regalos de ropa, oro y plata para el Profeta. Cuando Naamán le dio al rey Joram la carta de presentación, el la leyó y salió rápidamente de la habitación.

Rey Joram se angustió y rasgó sus ropas gritando, "¿por qué el rey Ben-adad me envió un mensaje que dice: ‘con esta carta presento a mi siervo Naamán. Quiero que le sanes.’ ¿Cómo puedo sanarle? Ben-adad quiere usar esto como excusa para enviar a sus tropas militares contra Israel".

Eliseo, el Profeta, escuchó de la angustia del rey. Eliseo sabía que el rey Joram no creía en pedir ayuda a Dios ni a los profetas de Dios.

Eliseo envió a Joram este mensaje: "dígale a Naamán que venga a verme para que sepa que hay profeta de Dios en Israel."

Cuando Naamán fue a casa de Eliseo, no fue invitado dentro. Las leyes judías prohibían contacto con leprosos. Eliseo envió un mensajero a decirle a Naamán, “ve al rio Jordán y sumérgete en él siete veces. Entonces, sanarás."

Naamán se enfureció. "Pensé que este profeta vendría a conocerme. Podía haber puesto su mano sobre mí y orar a su Dios para sanarme”.

Sus sirvientes le dijeron. "Siga las indicaciones de este profeta". Naamán era orgulloso, pero también era honorable. Fue al río Jordán y se sumergió en él siete veces. Enseguida su piel quedó sana y suave como la de un niño.

Cuando él y sus hombres regresaron a Eliseo, Naamán habló con humildad. "Al fin sé que no hay Dios en el mundo, excepto el Dios de Israel.  Por favor acepte regalos de mí parte". Eliseo respondió: "No. Ve en paz".

Este es Scott Thomas por Barbara Steiner con la historia de la Biblia de un hombre orgulloso y honrado. Por favor visite thisweeksstory.com.

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