This Week's Story
click aquí para audioEl perdón y la humildad abren oídos tapados y cabezas duras.
This Week’s Story relives American history and the Bible through brief inspiring stories presented on mp3 audio recordings and text for reading.
Por favor perdóname
La puerta de nuestro dormitorio se abrió silenciosamente, y mamá entró para decirnos “buenas noches”. Linda estaba durmiendo. Mamá la besó suavemente y caminó hacia el camarote. En la cama de abajo, Connie recibió un beso y un “buenas noches, preciosa”.
Luego, la barbilla de mamá estaba al nivel de la cama de arriba. Ella me miró y dijo: “cariño, lo siento que fui impaciente contigo hoy. Por favor, perdóname”.
Lo hice. Me sorprendió que mamá fuera tan humilde y fuerte para disculparse conmigo. Sabía que su disculpa era genuina. Diariamente veía su deseo de amar y obedecer a Dios y su compromiso de amarme y respetarme.
Cuando mamá pensaba que había actuado injustamente, ella no perdía el tiempo creando excusas para ella misma, aun si la otra persona había sido injusta con ella.
A menudo, decía, “mantén corta tu cuenta de pecados con Dios”. Ella creía que Dios considera el amor y la obediencia más importantes que el orgullo. Cuando el carácter causaba daño, ella decía el versículo de la Biblia, “No se ponga el sol sobre vuestro enojo”.
La práctica de mamá de humildad y respeto es una norma que ayuda a resolver argumentos en asuntos públicos y privados. Para que nuestro país sobreviva como una democracia representativa, debemos humilde respeto los unos a los otros.
Históricamente hemos estado de acuerdo con un proceso de gobierno, basado en el respeto y los derechos dados por Dios, que ha sido declarado en documentos como el escrito de la primera Crisis de Thomas Paine, la Declaración de la Independencia y la Constitución de los Estados Unidos.
Del escrito de la Primera Crisis por Thomas Paine:
Estos son los tiempos que ponen a prueba el alma de los hombres.
El soldado de verano y el patriota en tiempos tranquilos
se abstendrán en esta crisis de prestar servicio a su país;
pero el que puede resistir,
merece el amor y el agradecimiento de los hombres.
La tiranía, como el infierno, no es fácil de vencer;
pero tenemos este consuelo,
que cuanto más duro es el conflicto, más glorioso el triunfo.
Lo que nos cuesta poco, lo estimamos poco;
es solo lo que nos cuesta lo que da a cada cosa su valor.
El cielo sabe cómo poner un justo precio a sus bienes;
y sería extraño, en verdad,
que un artículo tan celestial como la libertad, no fuese altamente valorado.
De la Declaración de la Independencia:
Sostenemos como evidentes estas verdades: que los hombres son creados iguales; que son dotados por su Creador de ciertos derechos inalienables; que entre estos están la vida, la libertad y la búsqueda de la felicidad.
Preámbulo de la Constitución de los Estados Unidos de América
Nosotros, el pueblo de los Estados Unidos, a fin de formar una Unión más perfecta, establecer la justicia, garantizar la tranquilidad nacional, proveer a la defensa común, fomentar el bienestar general y asegurar los beneficios de la libertad para nosotros y nuestra posterioridad, por la presente promulgamos y establecemos esta constitución. Soy Elena Gamez. Hoy conocieron a la madre de la escritora Barbara Steiner.
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