This Week's Story

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Es el 29 dC y una viuda es despojado de sus recursos financieros por un juez corrupto.

This Week’s Story relives American history and the Bible through brief inspiring stories presented on mp3 audio recordings and text for reading.

¡Desposeída! parte dos

¡Desposeída! Esa soy yo – una viuda de Palestina del año 29 A.D. No se me permite administrar las tierras o dinero que dejó mi marido Pedro cuando murió. No tengo otro recurso financiero.

Mi esposo murió hace diez años. La corte asignó a James Miller para manejar las posesiones de mi esposo. Él es un farsante. No me da dinero y no me permite hacer nada con la propiedad de la familia. Me enteré que Miller y el juez estafan y roban a las viudas.

Mis hijos y yo somos pobres. ¡Es humillante! No tenemos dinero o comida. Se nos permite comer sobros en los campos de cebada y uva de los vecinos. Cuando Pedro vivía, teníamos suficiente.

Miller sabía que como niña no se me permitió ir a la escuela, pero mis padres me educaron. Me enseñaron habilidades y carácter. David, Hannah, Abigail, Ahab, y Josías siempre están en mi mente.

Cuando crecí noté un problema en la historia de mi país. Repetidamente nuestro pueblo ignoraba a Dios y la injusticia nos destruyó. Cuando pedíamos a Dios que nos guiara y le dábamos crédito por lo hecho, él nos ayudaba.

Llevo un profundo dolor dentro de mí, pero el dolor no me debe paralizar. Me duele haber perdido a Pedro. Recordarle me fortalece. Doy gracias por el amor que siempre me mostró. El, le daba gracias a Dios por mí. Juntos nos preocupábamos por la familia, casa, granja y finanzas. Trabajábamos duro y ayudábamos a los pobres.

Mi padre solía decirnos, "es increíble cuánto pueden lograr los esposos trabajando juntos". Pedro y yo ayudabamo mucho la gente de nuestra ciudad. Él formaba parte del consejo de la ciudad. Luego se enfermó. Yo no estaba preparada para su muerte.

Cuando el murió, pensé, "aunque sé cómo trabajar con las finanzas y agricultura, no tengo derecho legal para administrar el dinero y propiedad que Pedro dejó. ¿Cómo obtendré dinero, pagaré mis deudas o cuidaré de nuestra tierra?"

Por generaciones la tierra ha estado a cargo de la familia de mi marido. Esta tierra llegará a ser de mi hijo un día. Estoy orgullosa de cuidarla. Cuando Pedro vivía, yo inspeccionaba, compraba campos y contrataba los trabajadores. También hacía todo el papeleo para pagar deudas, compras y ventas. Ahora no me permiten hacerlo y no recibo dinero de Miller. Esto es injusto.

Voy a ir al juez otra vez. He nueve veces para presentarle mi caso. Me han dicho que él dijo, "no temo a Dios o al hombre, pero esta mujer me está volviendo loco. Voy a asegurarme que reciba justicia, porque me está sacando de mis casillas con sus constantes demandas".

Dios, talvez Miller necesite un empujón para obedecer tus leyes sobre el velar por los necesitados. Pediste a los Israelitas que dieran parte de sus cosechas a los extranjeros, huérfanos y viudas". Ordenaste, "No explotes a las viudas o huérfanos".

Doy gracias por mis hijos, por Pedro y por ti Señor. Por favor, guíame.

Soy Elena Gamez con una historia de Barbara Steiner. Es increíble que específicas son las leyes de Dios en la Biblia para la protección de las viudas. Por favor visite nuestra página thisweekstory.com.

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